Del 4 al 8 de octubre, en el marco del “Mes Misionero Extraordinario” querido por el Papa Francisco, el Obispo de la Diócesis de San Roque de Presidencia Roque Sáenz Peña, Monseñor Hugo Nicolás Barbaro, visitó comunidades de El Impenetrable Chaqueño.
Las actividades iniciaron en la parroquia de Santa Rosa de Lima, que dista a 320 kilómetros de la sede diocesana. El obispo pudo reunirse con el párroco, padre José Luis Steeman, y algunos grupos de fieles.
El recorrido continuó hacia la comunidad de Comandancia Frías, Sauzalito, Fuerte Esperanza y Misión Nueva Pompeya, perteneciente a la parroquia de San Francisco Solano, que se encuentra a más de 400 kilómetros de la sede diocesana.
En esas comunidades, Monseñor Barbaro se interiorizó de la intensa labor que llevan adelante el párroco, padre Julio Koska, las comunidades religiosas y los catequistas.La visita pastoral concluyó en la comunidad Miraflores, perteneciente a la Parroquia de Nuestra Señora del Valle, donde lo esperaba el párroco, padre Osvaldo Santillán.
Además de celebrar la Santa Misa en los diferentes pueblos, Monseñor Barbaro presidió la Fiesta Patronal de la Virgen del Rosario.
Desde distintos puntos, los fieles arribaron a la localidad de Nueva Pompeya para honrar a su Santa Patrona y encontrarse con el obispo.
También se llevaron a cabo numerosas confirmaciones de jóvenes y algunos adultos. El obispo animó a ser testimonio, a pesar de encontrar tantas dificultades, el Señor quiere iluminar la vida de sus fieles para que se animen a sacar adelante los sueños, especialmente para ayudar a los que más sufren.
El obispo animó la labor de las diferentes congregaciones religiosas presente en esas zonas. Que sacan adelante proyectos de educación, potenciando los valores y conservando elementos de la cultura,especialmente de las comunidades aborígenes.
Además promueven actividades para las familias,particularmente para las mujeres Wichí, en cuestiones básicas como mejorar la calidad de vida de sus hijos.En todas las celebraciones, el obispo recordó la cercanía del Papa Francisco, que conoce los desafíos del norte chaqueño, donde es difícil acceder a muchos sitios por el mal estado de los caminos.
El Santo Padre se comprometió a rezar por todas las familias y por las iniciativas que tengan los fieles para buscar una vida más digna para todos.