Buenos Aires. La exmandataria pretende ser habilitada para competir en las próximas elecciones y mantenerse en libertad, pese al fallo de la Corte Suprema. La estrategia se apoya en el antecedente de Gustavo Petro en Colombia. de esta manera busca fueron parlamentarios.
(CIDH) con el objetivo de que se le permita competir electoralmente a pesar del fallo condenatorio de la Corte Suprema que la inhabilita de forma perpetua para ejercer cargos públicos. La información fue revelada por el periodista Adrián Ventura en Todo Noticias (TN).
Según detalló Ventura, la estrategia legal ya está en marcha y se basa en el antecedente del actual presidente colombiano, Gustavo Petro.
En 2014, la CIDH intervino a su favor luego de que fuera destituido como alcalde de Bogotá y lo habilitó a participar en elecciones, invocando el artículo 23 de la Convención Interamericana, que garantiza el derecho a ser elegido.
El abogado de Cristina, Carlos Beraldi, confirmó públicamente que el caso será elevado a la CIDH. Sin embargo, TN informó que ya hubo
movimientos concretos: dos abogados de un prestigioso estudio jurídico estadounidense visitaron la sede del organismo en Washington, ubicada a pocos metros de la Casa Blanca, para preparar la presentación.
La expresidenta alegará que la Justicia argentina vulneró su derecho de defensa y que ni siquiera la Corte Suprema puede impedirle ser candidata ni privarla de su libertad durante un proceso electoral. Por ello, solicitará que la CIDH suspenda el fallo que la condenó a seis años de prisión e inhabilitación perpetua, en el marco de la causa Vialidad.
El tiempo apremia: Cristina busca que la medida cautelar se resuelva antes de las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre, a las que por el
momento no puede presentarse. La ofensiva judicial es su última carta política.
Aunque el caso de Petro difiere en cuanto a los delitos y el recorrido judicial —Cristina fue juzgada por corrupción y su condena fue ratificada
en todas las instancias durante 17 años—, el equipo de la exmandataria considera que hay elementos jurídicos y políticos suficientes para solicitar una intervención del sistema interamericano.
En paralelo, el kirchnerismo reorganiza su estrategia electoral y partidaria mientras la figura de Cristina Kirchner sigue siendo eje de tensión interna, especialmente entre La Cámpora y el gobernador Axel Kicillof.