12 septiembre, 2024

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El desmembramiento de Johana González trae al recuerdo a Maira Tévez que fue descuartizada en Sáenz Peña

Sáenz Peña. Lo que hoy tiene a toda la región atónita y afligida por el trágico final de Johana trae al recuerdo el asesinato de la joven pampeña ocurrido un 9 de abril de 2010, hace 14 años y 2 meses. Maira de 23 años fue asesinada y desmembrada por su novio, y sus restos esparcidos en la ciudad Termal.

El asesinato de la joven oriunda de Pampa del Infierno sucedió el 9 de abril de 2010 y los restos de Maira fueron hallados en distintos puntos de la ciudad al día siguiente. El asesino, su novio, escondió en la cámara séptica del departamento envuelto en nailon las extremidades del cuerpo de Maira, las piernas, y los brazos. Vecinos de la ciudad alertaron el haber encontrado barrio Santa Teresita la cabeza de una mujer (con un orificio como causa de un disparo de arma de fuego) con la que los perros jugaban en un patio. El torso de la mujer fue arrojado por el asesino en un baldío que oficiaba de basural y fue hallado por niños que jugaban en ese lugar.

La policía detuvo días después del asesinato a un ex estudiante de auxiliar quirúrgico, y ex pareja de la víctima. Se trataba de Héctor Ponce, conocido como «Nano». De su casa se logró secuestrar bisturíes, cuchillos multiuso junto con restos de sangre y cabello, y también se secuestró una motocicleta, propiedad de su madre, que tenía manchas de sangre (más tarde se supo que era sangre de Maira).

El asesino de Maira Tévez estando en prisión, cumpliendo una condena de 35 años, conoció a la hermana de un compañero de celda, Jesica Natalia Enríquez de 29 años de edad, con quien se caso tras un fugaz noviazgo.

Hoy la sociedad se conmueve nuevamente por un crimen atroz, en el que hay una similitud con lo sucedido hace 14 años: el desmembramiento de la víctima. Según la Policía, asegura que el sospechoso fue captado por cámaras de seguridad mientras se dirigía hacia la laguna, donde arrojaba bolsas negras de consorcio.

Se realizó un rastrillaje sobre la laguna con resultado positivo, encontrándose partes de un cuerpo femenino, el cual ha sido reconocido por la familia como el de Johana González. Horas posteriores encontraron más restos restos humanos, entre ellos, partes compatibles con una extremidad inferior.

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