Sáenz Peña. La Cámara Segunda en lo Criminal de Sáenz Peña a cargo de la jueza Rosana Glibota, iniciaron los alegatos en el juicio que se le sigue al abogado Erick Rebollo que, según las pruebas existentes, en estado de ebriedad y exceso de velocidad, atropelló y mató al motociclista José Poncey dejó gravemente herida a otra persona.
La causa llegó a juicio luego de la investigación realizada por el titular de la Fiscalía N°1, Marcelo Soto, bajo la imputación de «homicidio grave culposo en accidente de tránsito y lesiones graves culposas», hecho ocurrido el 1 de septiembre de 2018.
Con la presencia de las partes, el Ministerio Público Fiscal representado por Carlos Rescala, los abogados querellantes Martín Murcia y Miguel Mijaluk, comenzaron las conclusiones finales que continuarán el próximo 23 de mayo.
El fiscal analizó cada una de las pruebas existentes en el expediente donde destacó incluso las declaraciones en sala del imputado. Además, subrayó el estado en que Rebollo manejaba su vehículo: «Lo hizo alcoholizado y a gran velocidad y transitaba por calle 12 a 86 km/h».
Rescala relativizó el informe del perito de parte que, a su entender, «hizo explícito que quiso favorecer a su cliente». También hizo referencia en varias oportunidades de su exposición sobre el estado del imputado que «pasó toda una noche de esparcimiento, estaba sin dormir, no estaba en condiciones de manejar un auto», y agregó: «No tuvo reparos en conducir de esa manera, y se produjo el accidente que pudo ser evitable».
Según entiende el fiscal, «Rebollo, la mañana del 1 de septiembre, circulaba en suauto en un estado no aceptable, afectado en sus capacidades para conducir y que conforme a las distintas pruebas contrastan a lo manifestado por el imputado en su declaración en sala en cuanto a su proceder el día del accidente», por lo que considero que «es responsable del accidente».
Y añadió: «Rebollo ha infringido una norma, realizó una maniobra y condujo de una manera prohibitiva. Quiso manejar y manejó en ese estado, asumió voluntariamente una conducción imprudente. Hubo culpa temeraria por las condiciones en que estaba luego de una noche de esparcimiento. No tuvo miramiento en hacerlo de ese modo».
Por todo lo planteado, el Ministerio Público Fiscal a cargo de Carlos Rescala, pidió al tribunal que, en caso de compartir su criterio, Erick Rebollo sea condenado a 4 años y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo y realice un curso de capacitación.
