Buenos Aires. La titular de la Anses analizó el rol del Estado en la cuarentena y adelantó lo que vendrá en la post pandemia. “El objetivo es mejorar las jubilaciones, pensiones, asignaciones familiares y la AUH”, adelantó.
Llegó a la Anses hace casi tres meses en reemplazo de Alejandro Vanoli. Tomó el organismo en medio de la cuarentena y con la necesidad de seguir volcando recursos a los sectores más postergados. Hoy nueve millones de personas reciben el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que continuará en agosto y que podría seguir si el confinamiento se extiende.
La post pandemia necesitará un Estado presente. Sin esta ayuda será difícil imaginar una salida real para los más afectados por el coronavirus. ¿Vuelve la tarjeta Argenta? ¿Habrá nuevos créditos desde la Anses para reactivar el consumo? ¿Será posible crear un banco social desde el organismo para asistir a quienes la banca privada excluye? “El Presidente ya definió extender un tercer pago del IFE y nosotros ya estamos pensando cómo vamos a seguir después de eso. Buscamos el mejor instrumento para aplicar en un contexto económico difícil”, anticipa.
La directora de la Administración Nacional de Seguridad Social, Fernada Raverta, recibió a minutouno.com para dilucidar cómo podría ser el camino cuando la pandemia pase. Además, tiene en sus manos el proyecto de ley de la nueva fórmula jubilatoria que debatirá el Congreso para dejar definitivamente atrás la que se aprobó bajo corridas, detenciones, balas de goma y gases en 2017: “El Presidente extendió el decreto para los aumentos hasta fin de año. Eso nos da tiempo para debatir bien la nueva ley que sin duda deberá tener consenso para generar la mejor fórmula posible. El objetivo es mejorar el ingreso de las jubilaciones y pensiones, asignaciones familiares y la AUH. Nunca se me ocurriría presentar una fórmula regresiva o con ajustes”, definió.
¿Crees que va a ser necesario seguir manteniendo el IFE más allá de agosto por el contexto que estamos viviendo, con una pandemia que sigue afectando al país?
Ya estamos pensando como sigue aunque hoy no tenemos precisiones. El IFE arrancó como una medida excepcional por única vez para las familias que no tuvieron ingresos estables. Con el tiempo de la pandemia se pensó un segundo pago donde decidimos bancarizar a todos los que no tenían un CBU. Ahora vendrá el tercer pago por decisión de Alberto. EL estado va a seguir estando presente con la mejor herramienta que podamos aplicar. Cuál será, hoy no lo sabemos. Puede ser un IFE cuatro o de otra forma. Estamos analizando el impacto. Este ingreso no sólo llega a la persona que lo cobra, sino que además impacta en la economía con 90 mil millones de pesos que se gastan en negocios de proximidad. De alguna forma seguiremos presentes.
Hubo personas que recibieron el IFE y que invirtieron ese dinero en algún emprendimiento personal. ¿Esta nueva etapa puede apuntar en ese sentido?
Vamos a necesitar una mirada más institucional y más integral. La pandemia puso en relieve la desigualdad de Argentina. La post pandemia requiere un esfuerzo y una inteligencia común de los distintos organismos. Pensar en pequeña obra pública para lograr por un lado terminar con la precariedad habitacional de no tener agua potable, invertir en infraestructura urbana para además generar puestos de trabajo y poner en marcha la economía. Además resolver un tema habitacional de la Argentina. Entonces ahí tenés el Ministerio de la Vivienda y el de Desarrollo Productivo. Debemos ser inteligentes con políticas públicas que abarquen varios factores. Ese es el desafío.
Y en la post pandemia desde la ANSES ¿qué plan diagramás?¿ La vuelta de algunos programas como la tarjeta Argenta o de viviendas?
Uno de los ejes será la creación de puestos de trabajo. Ahí tenemos que poner sobre la mesa el Plan Procrear que además de lograr el sueño de la casa propia genera trabajo a partir de la construcción. Por otro lado, generar líneas de crédito para el consumo. Durante el gobierno de Macri las familias se endeudaban para pagar comidas o servicios. Antes de eso la tarjeta Argenta se usaba para ir a conocer las Cataratas o comprar una computadora para los nietos. Debemos pensar el consumo en base a eso, para poner la idea del crédito al consumo de bienes para desarrollar la economía nacional. En estos tiempos todos necesitaron de alguna forma del Estado. Estamos de acuerdo de que el Estado tiene que intervenir para que nos desarrollemos y podamos crecer.
Hablas de créditos y de la intervención del Estado. La banca privada no aportó mucho en estos meses. ¿Imaginas un banco de Anses?
Hay un proyecto histórico del organismo de hacer un banco social, pero la verdad es que en este contexto todavía no estamos analizando esa posibilidad. Sí con nuestra política de inclusión tuvimos un trabajo para que todos y todas tuvieran acceso a un CBU que es una cuestión de derecho básica. Nuestro enorme desafío es ampliar la inclusión pero con qué proyecto vamos en el día a día.
¿Cómo viene el proyecto de la nueva fórmula jubilatoria?
El decreto está vigente hasta fin de año. Nos da tiempo para discutir una nueva fórmula hasta fin de año en el Congreso donde están representadas todas las fuerzas políticas. Nosotros somos parte de esa discusión como integrantes del Poder Ejecutivo. Estamos discutiendo y generando las bases y las condiciones para pensar en la mejor fórmula posible. La propuesta la tenemos que trabajar con el Ministerio de Economía y de Trabajo. Cuando tengamos una síntesis correcta que creamos sea la mejor la presentaremos en el Congreso para que haya consenso y podamos implementarla. La meta no es otra que mejorar el ingreso de las jubilaciones y pensiones. Tener previsibilidad de lo que vamos a pagar.
El Ministro Guzmán mencionó que algunos bonistas presionan con el recorte de las jubilaciones…
Nosotros queremos mejorar la calidad de vida de los jubilados y jubiladas. Es nuestro objetivo. Nunca seríamos regresivos. Esa población debe ser abrazada y contenida por una política de Estado. Nuestro desafío es mejorar su capacidad de compra y su calidad de vida.
Desde la oposición critican el actual decreto de aumento jubilatorio, ¿cómo lo toman?
Gobernaron cuatro años y los jubilados perdieron con la inflación veinticuatro puntos de capacidad de compra en los últimos seis meses del gobierno de Macri. Los que critican demostraron no hace tanto tiempo que sus decisiones no fueron a favor de los jubilados y jubiladas. Deberían ser prolijos para opinar porque sus medidas hicieron que la economía en la argentina no creciera, que a las familias argentinas les alcanzará cada vez menos el salario, que el sistema productivo se detuviera. Estamos en democracia y pueden opinar, desde ya, ahora las críticas vienen de un sector que gobernó hasta diciembre y generó retroceso en términos de haberes jubilatorios.
En los últimos días se habló mucho del fuego amigo dentro del Gobierno. Venís de un sector más ligado a la Campora que está dentro de una coalición de gobierno…
Tenemos el enorme desafío de poner a la Argentina de pie atravesando un tiempo de complejidad que no nos hubiésemos imaginado nunca. Podemos recordar crisis institucionales, económicas, crisis sociales, políticas, ahora crisis sanitarias no tenemos memoria. Por eso el esfuerzo que tenemos que hacer es atravesar este tiempo. Esto requiere de la mirada de cada uno de los integrantes de esta coalición. Se construyó una expresión electoral que nos permitió ganar las elecciones y que ahora es una coalición de gobierno en donde todas las miradas tienen que ser tenidas en cuenta. Y ser tenidas en cuenta es integrarlas en una síntesis común. No hay manera de sobrevivir a la pandemia si no ponemos lo mejor de cada uno. Eso marca que lo que pongo yo es distinto a lo que pone el de al lado. Pero en esa diversidad de aportes y miradas vamos a construir la mejor síntesis posible para atravesar este tiempo y poner al país de pie después de la pandemia. Todas las opiniones son necesarias.
Y los sectores que plantean la pelea o imposiciones de Cristina a Alberto…
No sé si son sectores. Para mí son medios masivos de comunicación y es bien distinto.