La decisión de la ACTC de aplicar multas económicas ante faltas deportivas da para el debate.
Los pilotos no están para nada de acuerdo con tener que abrir la billetera cada vez que se mandan una macana en la pista. Los casos, que se pueden encontrar en las cuatro categorías teceístas, van desde los $ 5.000 que sale exceder la velocidad máxima en la calles de boxes (varios pilotos recibieron este castigo), pasando por los $ 50.000 por discutir con otro piloto en el parque cerrado (Mauricio Lambiris), hasta los $ 500.000 que debió depositar Mariano Werner por haberle arruinado el campeonato a Matías Rossi.
Rápidamente la entidad fue señalada como un ente recaudador, que multaba por el simple hecho de agrandar sus arcas. Por eso, la comisión directiva que comanda Hugo Mazzacane decidió en octubre del 2015 empezar a donar el dinero de las multas a cinco entidades: Fundación Favaloro, Comedor Los Piletones, Hospital Garraham, Hospital de Niños y la Ex Casa Cuna.