Sáenz Peña. Una menor de 14 años, residente en el barrio Aipo de Sáenz Peña, denunció, con la asistencia de su hermana de 26 años, haber sido raptada por una pareja. La adolescente mordió al hombre, quien luego le dijo que tanto él como su esposa están «locos» porque su hijo murió.
En su denuncia, la menor relató que anoche, alrededor de las 20:00, al salir de sus prácticas de hockey en el Polideportivo Municipal ubicado en las calles 28 y 27 del barrio Yapeyú, su vecino se ofreció a llevarla a su casa. Como era conocido de la familia, accedió y subió al automóvil, un Corsa gris oscuro.
Sin embargo, al percatarse de que el vecino se desviaba del camino a su vivienda, la menor le reclamó, momento en el cual este comenzó a golpearla y amenazarla, diciendo que se callara o la mataría. Incluso intentó ahorcarla, pero la menor logró morderle uno de los dedos, causándole una herida sangrante. El hombre la amenazó con un cuchillo, advirtiéndole que la apuñalaría si gritaba, todo esto según detalló la denunciante.
El hombre llevó a la menor hasta otra casa en una zona rural, donde se encontraba su esposa. Allí, el hombre le dijo que su mujer quería hablar con ella sobre lo que decía una amiga de su hija. Ataron las manos y pies de la menor con precintos de plástico negros y la llevaron a una habitación, donde el hombre la amenazó con un arma de fuego negra, diciéndole «callate o te voy a matar». La menor quedó encerrada en la habitación mientras su captor hablaba con su esposa.
Después de unas horas, ambos desataron a la menor y le dijeron: «Nosotros estamos locos, no sé qué nos pasa porque se murió nuestro hijo». Luego le entregaron 50.000 pesos para que no dijera nada de lo ocurrido. La joven pidió ser llevada a la casa de su amiga, a lo cual accedieron. Posteriormente, la menor regresó a su casa y, aunque inicialmente no contó nada, alrededor de las 23:00 le comentó a su hermana lo sucedido.