Buenos Aires. La puja es por las transferencias coparticipables que las provincias perdieron con la baja de ese impuesto. Caputo quiere que los mandatarios provinciales convenzan a sus legisladores para que voten la reforma del oficialismo.
El Impuesto a las Ganancias vuelve a estar en el medio de la puja política. Mientras los gobernadores reclaman compensaciones frente a la pérdida de recursos por la quita de la cuarta categoría dispuesta durante la gestión de Sergio Massa, el gobierno de Javier Milei busca dar marcha atrás con la medida para volver a cobrar el gravamen y presiona a los mandatarios provinciales para que sean los impulsores.
La Confederación General del Trabajo (CGT) espera conocer la letra chica de las medidas económicas para definir qué postura adoptar, aunque se mantiene en estado de alerta. Pero en las últimas horas, a la pelea se fueron sumando sindicatos que piden a los gobernadores que no acompañen la propuesta del ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, de volver atrás en la quita de Ganancias.
“Señores gobernadores les pedimos colaboración para que los legisladores de todas las provincias no convaliden la derogación de la ley 27.725 que permitió terminar con ese injusto impuesto al salario que fue el Impuesto a las Ganancias cuarta categoría”, reclamó La Bancaria en un comunicado.
Días atrás, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soea) San Lorenzo y la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (Ftciodyara) habían apuntado contra los mandatarios provinciales de Juntos por el Cambio de Mendoza y Corrientes, hicieron una presentación ante la Corte Suprema para que declare inconstitucional la ley impulsada por Massa.
Cumbre de Milei con gobernadores
Este martes, el Presidente encabezará una cumbre con mandatarios provinciales y el jefe de Gobierno porteño, que tendrá eje en la parte del plan de ajuste que involucra a las provincias: rebaja de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), eliminación de la obra pública y recursos coparticipables con la mira puesta en Ganancias.
Allí, los gobernadores peronistas buscarán dejar en claro que no están en contra de la quita de Ganancias, pero quieren que se cumpla la promesa de Massa de compensar los recursos perdidos. Una de las propuestas es coparticipar el Impuesto al Cheque. Para algunas provincias, los ATN sumados a la coparticipación representan más del 90% de sus fondos.
“Gildo Insfrán me transmitió que él no ha pedido que los trabajadores vuelvan a pagar Ganancias, que no quiere que el ajuste lo paguen los trabajadores y que los legisladores nacionales de Formosa de su espacio político no van a acompañar la iniciativa del oficialismo para que los trabajadores vuelvan a pagar el injusto impuesto a las ganancias”, dijo el titular del gremio bancario, Sergio Palazzo. Para Formosa, la coparticipación representa casi el 82% de sus recursos.
También aseguró que el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, le aseguró que “ellos no han pedido la derogación de la ley que derogó la cuarta categoría del impuesto a las ganancias. Lo que han requerido es una compensación”. Para la provincia, la coparticipación representa casi el 70% de sus fondos.
La rueda de consultas, Palazzo incluyó también al mandatario cordobés, Martín Llaryora, que -según dijo- le aseguró que “no han pedido al Gobierno nacional que derogue la ley que eliminó la cuarta categoría”. “También me manifestó que lo que han pedido los gobernadores es la coparticipación del impuesto al cheque para compensar los ingresos que no tendrán por dicha ley”, ratificó.
Los gobernadores, presionados por el Gobierno y los sindicatos
En su rol de diputado, Javier Milei votó a favor de la quita del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, pero al frente del Gobierno las cuentas no cierran y es su propio ministro de Economía el que impulsa la reversión, bajo la premisa de que será de manera momentánea.
Sin embargo, la disputa es quién pagará el costo político de la marcha atrás, ante una parte de la sociedad que se benefició con la medida y ante quienes votaron a La Libertad Avanza bajo la promesa de bajar y quitar impuestos.
Caputo dejó en claro que quiere que los gobernadores sean los impulsores y que presionen a sus legisladores para que voten la reforma por la que se volverá a cobrar Ganancias a los trabajadores.
En forma pública, los mandatarios provinciales dicen que no quieren el regreso del gravamen, pero empujan al Gobierno para que les compense la pérdida de recursos coparticipables.
Los sindicatos están en pie de guerra. “Según el ministro Caputo van a revertir la ley de Impuesto a las Ganancias que terminó con ese injusto impuesto sobre el salario. Su excusa es que los gobernadores se lo pidieron porque no podían pagar sueldos y aguinaldos, ya que ese tributo era una cifra muy importante de las recaudaciones provinciales. El fundamento que da Caputo es falso. El Impuesto a las Ganancias Cuarta Categoría no es más del 0,40% del PBI”, cuestionó La Bancaria.
Además, señaló que “solo el 56% de ese impuesto es coparticipable, entre 23 provincias y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”. En ese contexto, consideró que “los recursos para suplir la recaudación deberían provenir del incremental de 10 puntos del impuesto PAIS, haciendo coparticipable dicho impuesto o haciendo coparticipable el impuesto al cheque”.
Para enfrentar el ajuste, muchos gobernadores empezaron a achicar las cuentas provinciales. Como ejemplos de los últimos días, Santiago del Estero decretará la emergencia económica y anunciará medidas para bajar el gasto; San Luis pagará los sueldos de estatales en dos cuotas y decretará la emergencia; Misiones suspendió los pases a planta de empleados, a excepción de educación, salud y seguridad, durante el próximo año, y Salta suspendió las licitaciones de obra pública e incentivó los retiros voluntarios y las jubilaciones de trabajadores del Estado. En sintonía se expresó la mayoría de los mandatarios provinciales.