Sáenz Peña. El único imputado por la muerte de Ruth Acuña, fallecida en el mes de octubre del año pasado, prestó declaración y reconoció el asesinato.
Lo hizo ante el fiscal que lleva el caso, Marcelo Soto, y es la primera vez que confiesa haber matado a la joven.
En este contexto, Soto explicó que la causa ya estaba con el requerimiento de elevación a juicio y a punto de ser enviado a Cámara Criminal cuando el único imputado, quien era pareja de la víctima, decidió prestar declaración.
Al ser consultado sobre el tenor de los dichos de Alegra, el fiscal dijo que en términos generales “reconoció el hecho, reconoció haber matado a Ruth”.
Cabe rescatar que el femicida nunca había confesado el crimen oficialmente, sólo lo habría hecho ante su abogado.
Ahora, según pudo saber este medio, se lo dijo al fiscal Soto y agregó: «La maté porque la encontré con otro hombre».
Alegre contó también por dónde ingresó al domicilio de su ex pareja, dichos que coinciden con lo que había declarado el hijo de la víctima en Cámara Gesel. El menor también había mencionado la presencia de otra persona en la habitación de su madre además de Alegre.
El asesino ahondó en detalles y expresó que cuando ingresó a la habitación, Ruth estaba acompañada de otro hombre, a quien identificó con nombre y apellido.
Luego de eso Alegre se abalanzó sobre Ruth y la tomó del cuello hasta matarla. Tras el asesinato, el hombre abandonó el lugar y estuvo un mes prófugo hasta que finalmente fue detenido en la provincia de Santiago del Estero.
Antes de cerrar la investigación, el fiscal Marcelo Soto citará a la persona que acompañanaba a Ruth Acuña el día del hecho, citada por Alegre, para que preste declaración. Luego de eso la causa estará en condiciones de ser elevada a juicio.
Cabe recordar que Roberto Alegre fue imputado por el delito de Homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género.
EL HECHO
La joven Ruth Acuña fue estrangulada por su pareja Roberto Alegre, el 24 de octubre del 2017 y su cuerpo fue hallado por su hermana en la vivienda donde vivía junto a sus tres hijos en el barrio Matadero.
