Buenos Aires. En la UCR -por ahora- no hay ninguna expresión de rechazo ni apoyo explícito a las medidas que impuso Javier Milei por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), sin embargo -según pudo reconstruir Infobae- el partido centenario está dispuesto a acompañar los proyectos para desregularizar la economía pero no bajo el método libertario.
Los máximos representantes ya le exigieron públicamente al Presidente que presente un proyecto espejo en el Congreso o, en todo caso, una alternativa que les permita tratar los temas por separado. Por lo pronto, el martes tendrán una reunión clave para definir una postura y estrategia.
“El funcionamiento legislativo es lo que va a ordenar”, adelantó Martín Lousteau durante una entrevista con este medio, al ser consultado por el futuro de Juntos por el Cambio y la interna radical. El flamante presidente del Comité Nacional de la UCR tiene una oposición clara dentro del partido: el grupo Causa Federal que encabezan Alfredo Cornejo (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes). Los dos gobernadores perdieron la pulseada en la elección de autoridades partidarias pero se hicieron fuertes en el armado de bloques de Diputados y Senadores.
Luego de la reunión que tuvieron todos los gobernadores con Milei en la Casa Rosada -previo a la publicación del decreto- Valdés brindó una entrevista televisiva en la que ponderó: “Nosotros tenemos que acompañar la decisión democrática del pueblo argentino porque estamos teniendo, por primera vez, un presidente que dice ‘voy a revertir la situación, a comenzar a cambiar la situación argentina’”.
“Los gobernadores quieren aprobar el DNU y van a presionar”, analizan radicales con peso en el Congreso. En estos días, Valdés y Cornejo tuvieron reuniones con asesores y legisladores que les responden, pero evitaron pronunciarse públicamente sobre el decreto. Pero ya tuvieron su primer desencuentro con Lousteau, según pudo saber Infobae, por el comunicado que publicó la Mesa Nacional de la UCR, donde instaron a Milei a que convoque a sesiones extraordinarias y envíe un proyecto de ley espejo que pueda tratarse en el Parlamento.
“Este DNU tiene 82 páginas con 366 artículos que derogan y modifican un sinnúmero de leyes y decretos. En el contenido del Mega DNU hay algunas iniciativas que pueden ser interesantes y otras irrelevantes para la agenda urgente. Otras pueden juzgarse como buenas, malas o realmente muy malas para las urgencias de la sociedad. Cada una de ellas merece un análisis riguroso e individual y para eso está el Congreso”, analizó Lousteau en su cuenta de Twitter.
Maximiliano Abad, senador y presidente de la UCR bonaerense, apoyó la idea del líder de Evolución al asegurar que el partido está “dispuesto a colaborar con el gobierno en el avance de transformaciones profundas” y propuso tres alternativas para resolver el conflicto legal que puede llegar a enfrentar el DNU: “El envío de un proyecto de ley espejo que permite al Congreso ejercer su rol; un DNU por cada uno de los temas del DNU o que se modifique la ley de tratamiento de los DNU para permitir aprobaciones y rechazos parciales”.
El martes a las 16, las autoridades de la UCR, los bloques parlamentarios y los integrantes de la Fundación Alem tendrán una reunión virtual para analizar las medidas. En caso de que el Gobierno acepte – o proponga – una alternativa para lograr que el DNU ingrese al Congreso, los radicales consideran que deberán acompañar los proyectos para su aprobación, pero en el encuentro de la próxima semana analizarán en detalle las reformas que, en total, son 366.
Pero los correligionarios saben que los espera un largo trabajo parlamentario. Ya lo dijo el propio Presidente: “Les aviso que hay más”. Se descuenta que las próximas medidas son, entre ellas, la derogación de las PASO y el regreso del Impuesto a las Ganancias. En esos temas, según transmiten los radicales, es más probable que haya rispideces, enfrentamientos y disputas.
Los gobernadores son lo que más reclaman fondos coparticipables, que se vieron afectados por la eliminación del Impuesto a las Ganancias durante la gestión de Sergio Massa, y estarían de acuerdo con terminar con la instancia de elecciones internas. Una postura que podría chocar con Evolución y sus aliados.