Sáenz Peña. Una nota publicada este último viernes en un medio gráfico señala que el regreso «depende del pago de sueldos atrasados a los choferes», y se hace alusión a «la posibilidad de que los colectivos vuelvan circular». Diego Landriscina negó que pueda existir una acuerdo.
La publicación del medio no suma ninguna novedad a lo ya conocido, y sólo ofrece una suerte de espejismo, o tal vez una expresión de deseo del empresario que desde hace 80 días decidió parar el servicio y dejar de pagar salarios. «Sería la semana próxima y de manera transitoria», remarcan, mencionando que la información fue dada por «fuentes allegadas a los dueños de la Linea 1», o sea Julián Vilar, el empresario que unilateralmente decidió suspender el servicio para «forzar» (extorsionar) a la Municipalidad respecto a la pretensión de sumas de dinero que puedan cubrir su mala administración.
En la nota «las fuentes» que informan dicen que «si bien a pesar de la alternativa del municipio de implementar el recorrido con minibuses, no quiere decir que todavía se dé una solución al problema que ya lleva más de ochenta días».
Diego Landriscina en LT16am950 negó que pueda existir una acuerdo. Landriscina informo sobre la llegada de minibuses para la primer semana de septiembre, el sistema de cobro que podría permitir que la gente abone un solo pasaje al día y haga combinaciones con los ramales (como en los subtes porteños), y anticipó cómo serían los recorridos.
Para Landriscina, uno de los funcionarios de vínculos más estrechos con el intendente Bruno Cipolini, la relación con la empresa San Roque (léase Julián Vilar) no tiene vuelta atrás.
