Resistencia. El gerente de Planificación, Ricardo Requena repasa los avances en las distintas partes que conforman la obra hídrica, que por sus dimensiones es la más importante que se desarrolla en el país. Lo que resta completar y las previsiones de tiempos.
Con la próxima incorporación de un nuevo equipo de bombeo a la planta potabilizadora que forma parte de la estructura del Segundo Acueducto del Interior, ubicada en Barranqueras, hacia fines de noviembre se prevé que podrá impulsarse un 70% más de caudal hacia Sáenz Peña. Así, se pasará de poco más de un millón de litros por hora a 1,7 millones/hora. «Esto nos permite inferir que vamos mejorar la provisión de agua potable el próximo verano», indicó el gerente de Planificación de Sameep, Ricardo Requena.
El funcionario fue parte ayer de una recorrida destinada a medios de comunicación, junto al presidente de la empresa provincial, Gustavo D’Alessandro, por tres partes que son pilares relevantes del Segundo Acueducto: la toma sobre el río Paraná, el acueducto de agua cruda y la planta potabilizadora. «Son tres de los cinco componentes de la obra. Los otros dos son el caño de agua tratada y las estaciones de bombeo», explicó Requena, precisando que la obra en su conjunto presenta hoy un avance superior al 90%.
«Seguramente, el próximo verano se sumarán a la demanda las localidades donde se están terminando las redes domiciliarias, como Avía Terai, Napenay, Concepción del Bermejo, Pampa del Infierno y Los Frentones», indicó.
En esa línea, comentó: «De ahora en más vamos a ir incorporando equipos adicionales de bombeo para el segundo acueducto». Mientras señaló que la próxima localidad donde se habilitará el servicio será General Pinedo. «Hay que parar más de dos días, sobre todo Charata, pero estamos buscando alternativas para empalmar el caño entre esas dos localidades sin necesidad de parar el servicio», reveló.
En Pinedo, si bien el caño del acueducto está finalizado y resta hacer el empalme, están en ejecución las redes domiciliarias. Pero la intención en principio será que el servicio llegue de forma que el Municipio pueda cargar camiones y así poner el agua potable a disposición de la población.
Los avances
La obra de captación de agua del río presenta un avance del 90%. Aquí resta terminar la parte edilicia y dependencias donde se incorporarán productos químicos para tratar el agua captada, que muchas veces llega con materia orgánica. Y resta construir el terraplén de ingreso, desde la ruta nacional 16.
«Mirando hacia Corrientes, del lado derecho de la toma están las dos bombas que abastecen al segundo acueducto, ya instaladas, con capacidad de captación entre las dos de 6 millones de litros/hora, y que funcionan actualmente a un porcentaje mínimo; y hacia la izquierda las que van a abastecer a las plantas del área metropolitana», explicó Requena.
En tanto, el acueducto de agua cruda, está transportando 1,3 millones de litros de agua captada hasta la planta potabilizadora del Segundo Acueducto. «Esta planta está en producción desde noviembre del 2021, y el agua producida es impulsada directamente hacia Sáenz Peña y a Charata. Se envían alrededor de un millón cincuenta mil litros por hora en la actualidad», precisó.
De ese caudal, para Sáenz Peña quedan disponibles unos 900 mil litros/hora, sumados a lo que se impulsa por el primer acueducto. Éste sistema –más antiguo- transporta agua también a las localidades intermedias entre Resistencia y la termal (La Escondida, Presidencia de la Plaza, Machagai, Quitilipi, entre otras).
Los caudales almacenados en la planta de Sáenz Peña se envían, además de la propia localidad, a Villa Ángela, Santa Sylvina, La Clotilde, La Tigra y San Bernardo.
«Hoy en Charata no hay problemas de abastecimiento porque llega una cantidad de agua que la gente se acostumbró a acumular en sus cisternas o tanques. Ahí tenemos cubierta la demanda», afirmó Requena.
Sin embargo, contrastó esa situación con Sáenz Peña, donde sí existen problemas: «Si bien se incrementó en un millón de litros por hora la provisión desde el 2015 hasta ahora, la población creció mucho y también las comunidades que se abastecen en esa línea».
Lo que resta para terminar la planta potabilizadora
La planta potabilizadora del Segundo Acueducto trabaja en la actualidad a un mínimo de su capacidad de producción. Parte de esa estructura está terminada, y resta concluir el edificio propiamente dicho, el pavimento interno y el centro de provisión de energía con un transformador que llegará en enero de 2023, e incorporar tecnología de telecomandos.
«El problema más grave es la importación de algunas partes como válvulas y derivaciones, de diámetros grandes. Los problemas de paradas son porque no hemos recibido esos equipos de operación del sistema», mencionó el funcionario.
Asimismo, marcó que la idea ahora es incorporar próximamente a la planta un nuevo equipo más de bombeo, y destacó la colaboración de Secheep para proveer energía a esos nuevos equipos que se suman. «Tenemos capacidad ociosa en la planta y tenemos la debilidad en este momento en la impulsión», resumió Requena.
Teniendo en vista los porcentajes de avances en las distintas partes de la obra, y las complejidades que se presentan aún en algunas importaciones de partes y equipos, la previsión sigue siendo poder inaugurar el Segundo Acueducto a mediados de 2023. Y a eso apuntan todas las gestiones del gobernador Jorge Capitanich para destrabar aquellas compras en el exterior que por algún motivo restan llegar o tienen impedimentos en la Aduana.
«Pasamos por muchas cosas durante estos años. Se podría culpar a varios gobiernos, pero la verdad es que no tiene sentido. La obra estuvo paralizada en determinado tiempo y luego, para retomarla, costó mucho», repasó Ricardo Requena, quien está al frente desde la planificación misma de este acueducto.
«La idea es inaugurar esta obra a mediados del año que viene, y que los anexos que se plantean, por ejemplo hacia Río Muerto, se completen con el tiempo», indicó.
