Sáenz Peña. La cruda realidad fue narrada por el sitio Periodismo365. «El comisario estaba ocupado», y ante ello le pidieron «que vuelva mañana (por este viernes)», contó indignada la víctima.
El robo ocurrió el jueves a las 14.00 horas en cercanías del predio del Cottolengo, sobre calle 25 del barrio Yapeyú, cuando una comerciante de 37 años de edad, llevó en su automóvil a su hijo de 7 años hasta el domicilio de una maestra particular.
Bajó del auto con su hijo, lo dejó en la vereda con la docente, y cuando volvía al auto para subir, aparecieron tres motocicletas con seis delincuentes armados. Dos se bajaron, uno empuñaba un revólver y el otro un puñal, la amenazaron de muerte, y ella les dio el teléfono y se fueron.
«Una vez que me robaron se fueron todos contentos gritando insultos y sapucais. Mi hijo se asustó mucho y no paraba de llorar, como también la maestra. Inmediatamente me fui a la Comisaría 4º donde no me quisieron tomar la denuncia, porque los policías muy amablemente me dijeron que yo estaba muy alterada y me tenía que calmar, y que además el comisario estaba ocupado. Y que vuelva mañana (por este viernes)», contó indignada