Un grupo de jóvenes ocasionó esta madrugada un gran desorden en las calles del barrio 134 Viviendas de Sáenz Peña al atacar a las casas y a la Policía. Vecinos de la zona sufrieron robos y roturas de puertas. Por los disturbios detuvieron a siete personas y cinco efectivos resultaron heridos.
Los incidentes comenzaron cerca de las 3 de la madrugada de este viernes, cuando un grupo de jóvenes agredió a un empleado policial que cumple funciones “de consigna” en la plaza 20 de Junio del barrio 134 Viviendas, según el informe policial.
Los jóvenes rompieron las luces del alumbrado público y las baldosas del lugar. Luego “arrojaban cascotes contra las viviendas cercanas, forzaban las aberturas y portones”.
Efectivos de la Policía acudieron para neutralizar a los “revoltosos”, pero fueron atacados en varias oportunidades con “todo tipo de elementos”. Pese a la resistencia que opusieron, llegaron refuerzos de Infantería y el COM, quienes utilizaron escopetas anti tumultos y los desplazaron hasta el límite con el barrio 100 Viviendas.
Tras reorganizarse en varias ocasiones y avanzar en medio del desorden, los agentes detuvieron a siete personas, entre ellas una mujer y dos menores. En poder de los mismos secuestraron chuzas, trozos, de hierros, cuchillos y un machete.
Por los enfrentamientos resultaron lesionados cinco uniformados y tres móviles policiales fueron dañados por impactos de botellas y cascotes en su estructura.
La Fiscalía en turno dispuso la aprehensión de las personas identificadas por “Supuestos daños en bienes del Estado, atentado y resistencia contra la autoridad, robo y lesiones”.
Por los hechos vandálicos varios vecinos fueron víctimas en sus domicilios con daños en puertas, portones y candados, además del robo de varios elementos construcción, una bicicleta, mesa, silla, documentaciones varias.
“Es una verdadera vergüenza lo que está pasando en el barrio, los amenazan a la policía, a los vecinos, a donde hemos llegado con toda esta gente”, se quejó un vecino al explicar la situación.
Aseguró que “una vez más anoche empezaron los ladrillazos a las casas y a la Policía. Los chicos se esconden debajo de la cama porque tienen miedo, no sé dónde va a terminar todo esto, estamos cansados”.
